En representación de los 49 trabajadores intoxicados por mercurio en 2012 en la fábrica de Asturiana de Zinc (AZSA), se ha iniciado una huelga de hambre. Tras un largo proceso de mediación iniciado en febrero de 2019 a solicitud de AZSA a través del Instituto de Mediación del Principado de Asturias (IMPA), se alcanzó un acuerdo que garantizará tratamiento médico y mejoras en la salud y asistencia sanitaria de los afectados. Tanto los trabajadores como AZSA han expresado su satisfacción por este acuerdo, que pone fin definitivamente al conflicto.
“La mediación de los afectados por el mercurio con la empresa Asturiana de Zinc ha sido la segunda más larga de las que he llevado a cabo”, explicó a LA NUEVA ESPAÑA el abogado Agustín Azparren, el responsable del cierre de una crisis de ocho años que comenzó, precisamente, cuando cuatro trabajadores de la empresa Ingeniería y Montajes del Norte (Imsa) fueron ingresados en el Hospital San Agustín y en el Central de Asturias con síntomas compatibles con la intoxicación por mercurio. “Comenzamos en febrero de 2019 y ahora, a finales de este octubre, terminamos tras haber tenido 15 reuniones. Las primeras con cada parte y el resto, con todos los protagonistas. Tras el acuerdo, que es secreto, lo elevamos a escritura pública, es decir, fuimos a un notario. Esto funciona como una sentencia”, sentenció Azparren»